La Unión de Enfermos Misioneros (UEM) de El Salvador celebra la XXXI Jornada Mundial del Enfermo
En 1992, el Papa Juan Pablo II decidió que la Jornada Mundial del Enfermo se celebrara cada 11 de febrero, que es también la festividad de Nuestra Señora de Lourdes, patrona y auxilio de todos los enfermos; a la que se han atribuido una gran variedad de milagros en la curación de muchos moribundos.
La fe nos enseña que la enfermedad, las limitaciones físicas, psicológicas y morales, el dolor y la pobreza, pueden convertirse en una fuente de beneficio, en un valor añadido, en un talento que el Señor pone en nuestras manos.
La UEM, es una rama de la PROPAGACIÓN DE LA FE cuyos miembros, hombres y mujeres sin distinción alguna, responden a su vocación misionera y contribuyen con sus actividades y esfuerzos para que los enfermos, los inválidos, los ancianos, ofrezcan su dolor, sufrimiento y oración uniéndose al sacrificio de Cristo; por las MISIONES, por el aumento de las vocaciones y para que el mensaje de salvación de Jesucristo llegue a toda criatura.
En El Salvador, la celebración de esta jornada mundial es muy importante. En este día, se pide a todas las personas que se solidaricen con los enfermos de su comunidad, llevándoles no sólo medicinas, sino también sosiego y caridad cristiana.
Oramos por todos los que sufren en el cuerpo, en la mente y en el espíritu y que, con generosidad y amor, ofrecen su dolor y su sufrimiento al Señor por el bien de los misioneros y de la misión de la Iglesia.
