El ofrecimiento del sufrimiento por la Misión y los misioneros de todo el mundo

19 febrero 2021

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Sostener la acción misionera de la Iglesia es posible incluso cuando el dolor y la enfermedad no permiten ir físicamente a la Misión. Así lo afirma la Redemptoris Missio en el n.78: “A la oración es necesario unir el sacrificio. El valor salvífico de todo sufrimiento, aceptado y ofrecido a Dios con amor, deriva del sacrificio de Cristo, que llama a los miembros de su Cuerpo místico a unirse a sus padecimientos y completarlos en la propia carne. El sacrificio del misionero debe ser compartido y sostenido por el de todos los fieles… Con tal ofrecimiento los enfermos se hacen también misioneros”.

Lo recuerda también la Unión de Enfermos Misioneros en España, fundada en 1928 gracias al espíritu misionero de una enferma, Margarita Godet y difundida gracias a la obra del sacerdote Ignacio Villanueva, quien también estaba enfermo y no podía partir para las Misiones. En España, la Dirección nacional de las OMP publica bimestralmente el “Tríptico de Enfermos”, una publicación querida e inspirada por la Unión de Enfermos Misioneros. Cualquier enfermo que se encuentra sufriendo, puede ofrecer su dolor por las misiones, por la labor evangelizadora de los misioneros repartidos por todos los rincones del planeta para anunciar el Evangelio.  El Papa en su mensaje para la XXIX Jornada Mundial del Enfermo escribe: “La enfermedad impone una pregunta por el sentido, que en la fe se dirige a Dios; una pregunta que busca un nuevo significado y una nueva dirección para la existencia, y que a veces puede ser que no encuentre una respuesta inmediata. Nuestros mismos amigos y familiares no siempre pueden ayudarnos en esta búsqueda trabajosa” y menciona la figura bíblica de Job al cual, el mismo Dios le confirma que su sufrimiento no es no es una condena o un castigo, ni tampoco un estado de lejanía de Dios o un signo de su indiferencia.

La dirección nacional de las OMP en Colombia también trabaja en la pastoral de los enfermos para involucrarlos con la oración en la acción evangelizadora de la Iglesia: “La oración nos lleva a crecer en la humildad para reconocer a Dios nuestro Maestro, para servir a nuestros hermanos, no querer ser más que los demás, más bien sentirnos verdaderamente hermanos viendo en cada rostro un hijo de Dios y un hermano nuestro necesitado”.

El último número del Tríptico de Enfermos se puede leer aquí: https://www.omp.es/wp-content/uploads/2021/01/Enfermos-Misioneros-Enero-Febrero-2021.pdf